Sistemas de seguridad activa

Magic Eye

Los continuos desarrollos y nuevos sistemas de seguridad activa, especialmente concebidos para evitar situaciones críticas, hacen que cada vez la conducción sea más segura.

El Magic Eye es un sistema tecnológico avanzado de ayuda desarrollada por Datik, empresa del Grupo Irizar, que permite minimizar los riesgos de distracción y colisión, mediante la detección y previsión de situaciones a través de tecnologías de radar y visión artificial, lo que contribuye a aportar una conducción más fiable.

Este sistema incluye:

DFW: Detección y aviso de fatiga y distracción del conductor

La detección y aviso por fatiga y distracción del conductor es el elemento más diferenciador con respecto a otros productos convencionales. Consiste en supervisar los parpadeos y movimientos de los ojos y la cabeza con el objetivo de detectar acciones anómalas que conducen a reacciones de riesgo por parte del conductor gracias a su tecnología de visión artificial. En ese caso se activan las alarmas de aviso mediante la vibración del asiento al conductor.

El cansancio y poder quedarse dormido un segundo al volante son las causas más habituales de los accidentes de tráfico más graves. Este hecho afecta sobre todo a vehículos industriales, cuyos conductores pasan al día muchas horas en la carretera.

Una cámara situada en el salpicadero, apuntando al rostro del conductor procesa las imágenes y mide la frecuencia de parpadeo del mismo. Este innovador sistema funciona bajo condiciones de iluminación nula, sin molestar al conductor, utilizando para ello iluminación infrarroja. Así, se evitan problemas de luminosidad y también permite que el sistema funcione cuando los conductores llevan cualquier tipo de lentes incluso algún tipo de gafas de sol.

Además, ofrece una importante ventaja competitiva con respecto a otros productos convencionales, que se centran en avisar únicamente al conductor. Incluye servicios de grabación de imágenes, registro de alertas, eventos, así como información que se transmite a una unidad central a través de una plataforma web, lo que permite extraer conclusiones y gestionar toda la información recogida para la detección de infracciones cometidas y la planificación de rutas más seguras o la optimización hábitos en la conducción. Magic Eye se convierte así en una solución íntegra diseñada para la gestión de flotas, que permite a la vez ahorrar en combustible y minimizar los riesgos de distracción y colisión, lo que contribuye a aportar una conducción más segura, eficiente y fiable.

LDW: Aviso de salida involuntaria de carril.

El objetivo es avisar y alertar al conductor cuando ha existido un cambio de carril que pudiera estar motivado por una distracción del conductor.

La detección de los cambios de carril se realizará mediante una cámara frontal que obtiene imágenes de la carretera y las procesa utilizando técnicas de visión artificial. El sistema lee al mismo tiempo el estado de los intermitentes para averiguar si se ha señalizado la maniobra y el cambio ha sido intencionado.

El sistema es capaz de discriminar entre cambios de carril e invasiones de carril. Se entiende por cambio de carril aquellos que impliquen un desplazamiento lateral suficientemente amplio como para que el vehículo se posiciones en el carril contiguo.

Las invasiones de carril, en cambio, hacen referencia a aquellas circunstancias en las que parte del vehículo pisa por unos instantes alguno de los carriles contiguos, pero el vehículo permanece en el mismo carril.

Cuando el sistema genera una alerta, le avisa al conductor mediante la vibración de su asiento. Si el conductor invade el carril izquierdo le vibra la parte izquierda del asiento y si por el contrario invade el carril derecho, vibra la parte derecha del asiento.

Este sistema está orientado a transportes de media y larga distancia, para carreteras de alta capacidad. Se activa cuando el vehículo supera los 60Km/h.

FCW: Aviso de riesgo de impacto con el vehículo precedente

El objetivo es avisar y alertar al conductor cuando hay un vehículo en la parte frontal por debajo de la distancia de seguridad.

El sistema consiste en la instalación de un radar en la parte frontal del vehículo. Alerta haciendo vibrar el asiento del conductor cuando el vehículo circula por encima de 60 km/h y el vehículo que le precede está a menos de 70 metros, siempre que la velocidad sea inferior a la del autocar equipado con este sistema.

El radar mide la distancia y la velocidad de los objetos que rodean al vehículo basándose en el efecto Doppler, con una precisión cercana a los 0,25 metros y a los 0,5 Km/h. El sistema evalúa aproximadamente 15 veces por segundo la situación del entorno del vehículo, para determinar si está en una situación de riesgo por alcance o no.